Los animales domésticos a quien tanto queremos, y nos hacen compañía, sistémicamente, están a nuestro servicio y son capaces de enfermarse por nosotros.
Cuando a sus dueños les sucede algo doloroso en sus vidas, ellos se ofrecen de buena gana a estar a nuestro lado y hasta enfermarse y sufrir por nosotros. En algunos casos hasta son capaces de dar su vida por su amo.
En Constelaciones Familiares decimos que juegan la dinámica #Yo por ti# o #Yo en tu lugar#.
Si bien ellos lo hacen de buena gana, somos nosotros quienes debemos hacernos cargo de nuestros problemas y así liberarlos de tanto sufrimiento.
Muchas veces se trata de implicancias de generaciones anteriores o también enredos del presente.
Las Constelaciones Familiares permiten ordenar nuestro sistema y poder decirle a nuestra mascota #Ya fue suficiente, a partir de ahora yo me ocupo, te libero#.